ZeroQ, la startup que reduce las filas virtuales, alista su apertura en bolsa a través de ScaleX
La compañía espera debutar en junio en la plaza bursátil y recaudar US$ 3 millones para consolidar sus operaciones en Chile y arribar a nuevos mercados: Perú y Colombia.
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Tras el debut bursátil de la empresa de robótica Osoji y la pronta apertura de la farmacia Fracción, un tercer actor cotizará en la Bolsa de Santiago a través del programa ScaleX. Se trata de ZeroQ, una startup que se vale de inteligencia artificial para reducir los tiempos de espera en la atención al público de distintos tipos de sucursales.
De la mano de Bci Corredor de Bolsa y con la asesoría de EY, ZeroQ espera debutar en bolsa en junio con el objetivo de recaudar US$ 3 millones para potenciar su plan de crecimiento en la región, mediante la consolidación de sus operaciones en Chile y la expansión a Perú y Colombia.
“El hecho de que la empresa tenga la opción de estar en un mercado secundario de acciones respaldado por la Bolsa de Santiago da una mayor liquidez, lo que es muy interesante para cualquier inversionista”, dijo a DF el cofundador y CEO de ZeroQ, Ernesto Erdmann.
ZeroQ utiliza un programa de inteligencia artificial que predice la cantidad de personas que llegarán a una sucursal en un determinado horario, con lo que luego simula diferentes combinaciones hasta encontrar la mejor forma de organizar las citas.
“Hemos visto cómo las soluciones de ZeroQ son de gran utilidad para sus clientes y están en un mercado donde el potencial, tanto en Chile como en la región, es muy grande”, dijo el gerente general de Bci Corredor de Bolsa, Juan Pablo Monge.
Relación win-win
ScaleX Santiago Venture Exchange es un programa desarrollado por la Bolsa de Santiago y Corfo que permite a empresas de menor tamaño abrirse en bolsa y que poco a poco ha venido tomando fuerza. Osoji -conocida por sus aspiradoras robóticas- fue el primer beneficiado, mientras que la farmacia digital Fracción será el segundo actor en debutar en este mercado.
“Esto es un win-win, donde hay transparencia tanto del inversionista como de la empresa. Por un lado, se entrega toda la información a los inversionistas y ellos pueden saber en lo que están invirtiendo. Por el otro, la empresa puede optar a tener una valorización mejor porque se sabe que muchos inversionistas compiten por invertir en ella y ahí obviamente hay una pelea por el precio”, explicó Erdmann.
Desde que dio sus primeros pasos en 2015, ZeroQ ha recibido un total de US$ 400 mil de capital entre aportes públicos y privados. En 2022, facturó US$ 2 millones, lo que significa que por cada dólar aportado en capital, lo convirtió en US$ 5 de facturación, lo que a juicio del ejecutivo, es “un número altísimo para un startup de software”.
Erdmann indicó que no solo van a participar actores de venture capital, sino que también otros tipos de fondos como los small cap y también los inversionistas retail. “Entonces, hay una competencia superior y eso permitirá que los inversionistas ‘muñequeen’ menos el precio y valorar de mejor manera los logros de la compañía”, sostuvo.
El ejecutivo reveló que los antiguos inversionistas de la empresa se comprometieron de forma voluntaria a no vender las acciones por el lapso de un año.
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